top of page

No me quiero ir


Se supone que este momento debería estar muy feliz. Un instante en donde recuerde todos los sacrificios que hice para cumplir mi sueño, pero nunca he comprendido que los seres humanos seamos limitados y no podamos tener todo lo que queremos. No me quiero ir, de eso estoy seguro, pero es lo que tengo que hacer… No quiero dejarte, no quiero irme de tu lado, pero mi destino está marcado y debo salir del país para estudiar. Se me hace imperioso conocer el mundo y romper las limitaciones que mis ojos tienen, puesto que, me impiden ver todo a mí alrededor con su verdadera claridad. Lamento profundamente conocerte y haberme dado cuenta de que eres todo lo que siempre he querido para mi vida. ¿Por qué nuestros corazones no se reunieron antes? Hubo tanto tiempo en que deambulé sin hacer nada productivo y considerando que los aspectos comerciales y profesionales de la vida… eran primordiales antes que el amor. Sin embargo, él está en el aire y el hilo rojo de nuestros corazones, dejó que ocurriera lo inevitable. No sé para quién es más difícil todo esto, pero me ha costado mucho estar en todas las despedidas que me han preparado, nunca es fácil decir adiós y lo que es más difícil, saber si ese adiós… será por un corto o largo tiempo. Todas las personas que se han tornado un momento para despedirse de mí, me evocan un trozo de diferentes instantes en los que me he sumergido en el paso de la vida, que solo ha permitido enriquecer mis experiencias y mis ganas de tomar el mundo en mis manos. No obstante, las dudas son las que calcinan mi cerebro y me impiden buscar una alternativa que me dejé feliz por alejarme de tu lado. Es justo que te deje partir, es justo que no estés esperándome aquí y que te conviertas en la Penélope de nuestra historia. No es sencillo dejarte cuando he descubierto que puedo amar sin limitaciones, pero no puedo quedarme, no puedo seguir aquí, mi intuición alude a que es necesario que vive este momento de nostalgia para inspirarme y enamorarme nuevamente de una vida, que hace mucho tiempo he dejado de sentir ese apego que los seres humanos deberíamos tener. He decidido cerrar mi corazón y terminar contigo, porque huir del amor hasta el momento es lo único que me ha dado resultado y pretendo que tengas una felicidad que al menos yo no te puedo dar. Será difícil apaciguar el fuego de mis emociones cada día que no esté contigo. Sin embargo, si algún día quieres escribirme, yo siempre estaré aquí, pero te pido encarecidamente que no lo hagas, puesto que mi amor se descontrola y no podré evitar seguir unido al hilo rojo de nuestro amor.